Ojo de Tanger

1,20 

Categoría:

Descripción

Si nos imaginamos Marruecos, seguro que la mayoría vemos los grandes zocos y mercados locales que se encuentran por sus calles. Mientras vamos caminando y
explorando los pequeños mercados, nos topamos con un vendedor de telas que resaltan a la vista por su calidad y sus colores brillantes, con diseños únicos que nunca habíamos visto.

Quedamos embobados viendo una de aquellas telas, por lo que decidimos acercarnos para ver si podemos adquirir esas maravillosas telas. En esto, el artesano nos cuenta la historia que existe detrás de algunas telas, cómo han sido confeccionadas, lo antiguas que pueden llegar a ser algunas de ellas o cómo han pasado de generación en generación.

Una pulsera no solo puede llevar una tela, por muy cautivadora que sea, por eso nos ponemos en búsqueda de alguna piedra preciosa que le haga justicia a la tela. No tardamos mucho en encontrar un puesto con piedras de todos los tamaños y colores, era eso lo que las hacían únicas, ninguna era igual a otra. En ese comercio nos cuentan que en Marruecos existe una leyenda : “La pulsera que ose llevar tres piedras otorgará dinero, salud y amor a la persona digna de llevarla”. Así que, decidimos utilizar piedras pequeñitas para el relleno y las tres grandes piedras mágicas.

Por esto nos decidimos por ellas para nuestra pulsera, y porque ninguna va a ser igual a otra, ya que ninguna experiencia, ningún viaje ni ningún momento, va a ser igual que otro.

La razón por la que hemos dado el nombre de “El ojo de Tánger ” a nuestra pulsera, es porque es un abalorio que atrae la buena suerte, siendo el ojo el máximo exponente de la buena suerte en la cultura marroquí, así como en muchas otras como en la turca; y concretamente de Tánger traemos los materiales con los que se produce esta.